En un acto que ha generado indignación, el comisariado ejidal de la agencia Donají, en Oaxaca de Juárez, encabezado por Juan Luría Anaya, despojó a un grupo de niños con discapacidad de su escuela. Este sábado, Luría Anaya, junto a otros miembros del comisariado, ingresó al predio y colocó sellos, así como una lona que advierte: “Este lote de terreno pertenece a la autoridad ejidal de Donají, no te metas en problemas”. La lona lleva el sello de «Campesinos de América Unidos» y el período de 2022 a 2025.
Esta acción vulnera un amparo promovido por los padres de familia ante las autoridades agrarias, en el cual se había establecido que la comunidad cedía el terreno para la escuela, un acuerdo que ahora está siendo ignorado por el comisariado.
Donají Maribel Chávez Hernández, presidenta del Comité Procam, Jazmín Mora Ziga, y otros padres de familia expresaron su preocupación, señalando que el Centro de Atención Múltiple (CAM) lleva más de 18 años brindando servicios educativos en ese lugar. El sábado, el comisariado no solo colocó los sellos y la lona, sino que también instaló una reja con cadenas y candados, bloqueando el acceso a los niños y sus padres.
“Nos parece una barbarie, una arbitrariedad. Es una escuela, no un antro de vicio”, declaró uno de los padres afectados. Hicieron un llamado urgente a las autoridades, incluyendo al gobernador, al agente municipal y al presidente municipal, para que intervengan y eviten que el comisariado ejidal cumpla con lo que consideran un capricho para desalojar a los niños del inmueble.
Según los padres, el comisariado planea instalar sus oficinas en el lugar, lo que lo ha motivado a expulsar a los niños que reciben su educación en esa escuela. A pesar de haber sostenido conversaciones con el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), en las que se acordó que el derecho a la educación debía ser prioritario, el comisariado sigue adelante con sus acciones.
Actualmente, 42 niños con discapacidades reciben educación en este CAM. Los padres han anunciado que, si el acceso sigue bloqueado para el próximo 26 de agosto, instalarán módulos en la calle y reanudarán las clases en esas condiciones. Muchos de estos padres, que viven al día y ya enfrentan los altos costos de terapias y cuidados para sus hijos, temen no poder trasladarse a otro centro educativo, como sugiere el IEEPO, debido a las dificultades de movilidad.
Los padres consideran que la mayoría de los ejidatarios los apoya, pero insisten en que es crucial que las autoridades de otros niveles intervengan para evitar que el despojo se concrete. Según informes, el comisariado presentó un documento con firmas de otros ejidatarios para justificar la recuperación del predio, que había sido cedido a la escuela por la comunidad.
“Esto es un abuso de autoridad, un delito. Él se siente dueño de todo por ser autoridad”, afirmaron los padres, quienes también pidieron al procurador agrario que actúe conforme a derecho y no avale la arbitrariedad cometida en Donají. El amparo vigente protege el derecho a la educación de estos niños, y las autoridades han sido omisas en su obligación de garantizarlo.